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Foto: Prensa CAB
Belgrano cayó ante Independiente en la última fecha del Torneo Binance 2023, encuentro en el que mostró muchas dificultades para crear situaciones de riesgo.
Una de las principales razones que explican ese déficit fue la ausencia de Matías García -micro desgarro en el isquiotibial izquierdo-, un jugador determinante y abanderado en la racha positiva que el equipo logró en los encuentros anteriores al cruce con el Rojo.
Para ocupar el lugar del Caco, el entrenador Guillermo Farré ordenó el ingreso del delantero Iván Ortigoza, variante que no brindó soluciones en materia de creación, ya que sus características lo distinguen como un jugador de desequilibrio y explosión más apto para actuar en el último tercio del campo que en la segunda fracción donde se gestan las jugadas.
En consecuencia, Bruno Zapelli y Ulises Sánchez carecieron de un socio con capacidad para vincularse con ellos, que brinde opciones de pase mediante apoyos y rupturas, y por ende capaz de fortalecer el juego asociativo interior que abasteció a los delanteros Franco Jara y Pablo Vegetti en las últimas fechas.
Durante el primer tiempo, con Santiago Longo tomado por los delanteros rivales, los zagueros Alejando Rébola y Erik Godoy no tuvieron alternativas de descarga ya que los propios Zapelli y Sánchez fueron marcados por Marcone y Ortiz. Además, en los carriles exteriores, Axel Ibacache y Gabriel Compagnucci estuvieron emparejados por Cuero y Cazares respetivamente, por lo que tampoco fueron opciones de pase potables.
En virtud de ello, a Independiente le bastó su disciplina para agruparse en bloque y obstaculizar los intentos celestes.
Ante este panorama, en el segundo tiempo, Farré decidió reemplazar a Ortigoza por Ariel Rojas, un futbolista con mayor capacidad de asociación.
Sin embargo, pese a tener características compatibles con las que requieren Sánchez y Zapelli en los carriles interiores, el Chino tampoco logró desempeñarse en la zona de creación, sino que se ubicó en la zona de inicio donde no pudo participar mucho en la tarea de salir desde el fondo.
El hecho de circunscribirse a ese sector con poca movilidad le impidió al volante otorgar líneas de pase a sus compañeros. Ello resultó llamativo ya que, como se vio por ejemplo en el cruce ante River, los mejores aportes de Rojas se dan cuando se adelanta metros y respalda maniobras ofensivas.
En ese contexto, Zapelli quedó aislado ante la marca de Barcia cuando volcó su juego hacia el carril externo izquierdo, y doblado por Marcone y Ortiz cuando centralizó.
Los ingresos de Mariano Miño y Guillermo Pereira tampoco generaron mejoras en términos de creación. Los volantes fueron hasta triplicados en ocasiones por las marcas de Independiente, razón por la que no gravitaron.
Además, si se analizan las características de uno y otro, solo Miño cuenta con aptitudes para generar juego. Pereira, en cambio, es un futbolista mixto y de dinámica, es decir que puede aportar más en otros aspectos.
Tomando en cuenta todo lo anterior, el desafío de Farré es encontrar un jugador que pueda suplir la ausencia de García, pieza clave en la generación de juego durante la racha de cuatro victorias consecutivas que la B registró anteriormente en el Torneo Binance.
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