Solidez defensiva y carencias ofensivas: las dos caras de Belgrano ante Independiente Rivadavia

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Foto: Prensa Belgrano

Belgrano igualó sin goles ante Independiente Rivadavia por la fecha 3 del Torneo Clausura. El análisis.

Dos cambios

Con Sánchez (Zelarayán) y Passerini (Jara) como variantes, Belgrano alineó un sistema que varió entre un 1-5-3-2 y un 1-4-4-2. El equipo tuvo una postura reactiva y careció de posesión en los primeros pasajes.


En defensa

Ante el repliegue pirata, el local hizo retroceder a Villa entre líneas: no para generar superioridad numérica, pero sí para intercambiar posiciones, asociarse con Gómez por dentro, atraer marcas del mediocampo y lanzar hacia el flanco izquierdo de la defensa celeste. 


En ataque

Belgrano apenas generó aproximaciones. ¿Cómo?: con la vieja fórmula de buscar en largo a Fernández y Passerini, para luego apostar a la segunda jugada. Así gestó un remate de Uvita que se fue afuera y otro de Metilli que Centurión contuvo. Más allá de eso primaron los duelos perdidos tras los envíos largos y también las imprecisiones después de tomar rebotes.


Error propio y Cardozo presente

Al finalizar el primer tiempo, un pase corto de Morales dejó a Villa mano a mano, pero Cardozo reaccionó a tiempo y disipó el peligro.

Solo destellos en campo adversario

En el primer segmento del complemento, el Pirata tuvo una leve mejora en terreno rival, debido a que mostró mayor proactividad para progresar, ganar duelos y segundas jugadas: tuvo un disparo de Sánchez que salió cerca (tras rebote de Fernández) y otro de López, quien rompió por dentro y buscó el arco.


De todas formas, el Celeste no pudo sostener esa labor con el transcurso de los minutos, dando cuenta de carencias ofensivas: fue impreciso con sus pases largos, volvió a perder mucho en el último tercio y no fue capaz de darle continuidad a las segundas jugadas que logró capturar.

Buscar por afuera

Con el ingreso de Mavilla (Metilli) y Reyna (Fernández), Zielinski buscó velocidad y verticalidad manteniendo el sistema.


Más allá de dos acciones del ex Temperley desequilibrando ante Gómez, la B no fue capaz de crear riesgo con futbolistas que en muchas ocasiones debieron batallar en soledad, sin apoyos cercanos, con marcas por duplicado.

Su principal virtud

Contrariamente a lo que sucedió en el plano ofensivo, lo más destacable de Belgrano se vio en materia defensiva con una última línea que dominó los duelos que disputó, despejó numerosas pelotas y fue clave para mantener el arco en cero. También hubo un buen aporte del mediocampo que no concedió espacios y presionó con intensidad en los dos primeros tercios.


En fin: actualmente, Belgrano muestra solidez cuando defiende, algo muy valorable teniendo en cuenta su desempeño en el último semestre, pero sigue en deuda al buscar el arco rival ya que no logra desequilibrar en ataques organizados ni en pelota quietas ni tampoco en transiciones. Sostener la fortaleza defensiva y mejorar el funcionamiento ofensivo es el desafío que hoy tienen plantel y cuerpo técnico si el objetivo es ser un equipo realmente competitivo.


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